¿Te pasa a veces en el trabajo que van pasando las horas y parece que no has avanzado nada? ¿Que te sientes abrumada por todas las tareas pendientes pero no hay manera de completarlas y ponerte al día? ¿Que no te sientes centrada y enfocada en lo que estás haciendo?

Para ser eficientes en nuestro trabajo tal y como postulan Jim Loehr y Tony Schwartz (The power of full engagement), tenemos que centrarnos en cómo gestionamos nuestra energía (no nuestro tiempo). La energía es la clave para mantener un “alto rendimiento” y llevar una vida sana, feliz y equilibrada. ¿Y cuál es la base para incrementar nuestra energía? La base está en tener y mantener a nuestro cuerpo en sus óptimas condiciones.

No es la única, también tienen un papel esencial la energía emocional, la mental y la espiritual, (más información aquí) pero la base de la pirámide, según estos autores, es la energía física.

Así, pues, sí, cuidar de tu cuerpo afecta y mucho a tu rendimiento en el trabajo. ¿Y qué tienes que hacer para cuidar bien de tu cuerpo? La teoría que todos nos sabemos pero que a veces no aplicamos: una alimentación saludable, realizar ejercicio físico de manera regular, tener una buena rutina de sueño, mantener un peso sano y evitar los tóxicos (tabaco, alcohol…). 

El primer paso es darle la importancia que realmente tiene y asumir tu responsabilidad. O sea, tú eres la única responsable de cuidar de tu cuerpo y es esencial contemplarlo como una prioridad.

Te sugiero que vayas poco a poco, marcándote pequeños objetivos en cada una de las áreas: comer el 50% de verduras y frutas en cada comida, salir a caminar después de comer 15 minutos, ir a dormir 15 minutos antes… Y cuando tengas incorporados estos cambios, ir añadiendo más.

Pide ayuda si lo necesitas: un coach, un dietista, un entrenador personal…

Para llevar una alimentación saludable, te puedes basar en el plato saludable (creado por expertos en nutrición de Harvard School of Public Health). Es una manera gráfica simple de saber cómo organizar nuestras comidas: 50% verduras y frutas, 25% cereales integrales, 25% proteínas saludables. (Si quieres puedes descargarte mi guía para planificar y llevar una alimentación saludable aquí)

healthy eating plate

En cuanto al ejercicio físico, lo importante es moverse. Busca algo que te guste y simplemente muévete: andar, clases en el gimnasio, bailar, ir en bicicleta, patinar, jugar a básquet, yoga, karate…

Y por último y también muy importante, descansa bien: duerme las 7-8 horas que recomiendan los expertos, sé regular con tus horarios de sueño, créate una rutina para irte a dormir, saca los aparatos electrónicos de la habitación…

¿Me cuentas qué haces tu para ser eficiente? Comparte tu experiencia, ideas y opiniones dejándome un comentario. 🙂