Estamos en diciembre, queda muy poco para que lleguen las vacaciones de Navidad y en muchas empresas parece que está a punto de acabarse el mundo. Todo tiene que estar listo antes de las vacaciones: informes, presentaciones, reuniones de equipo, reuniones de todo tipo, planes, estrategias…
En resumen que es muy probable que estés viviendo una temporada de mucho trabajo y muy intenso.
Así que te invito a seguir estos consejos que te ayudarán a estar más centrada, a ser más productiva: minibreaks para ser más eficiente.
Como explican los autores Jim Loehr y Tony Schwartz, no estamos hechos para operar de manera seguida, sin parar, durante largos periodos de tiempo. Haciéndolo así, menguamos nuestra eficiencia y productividad. Más bien lo que tenemos que hacer para conseguir máxima eficiencia es operar en “pulsos”; gastando energía y reponeniéndola de manera periódica: ir haciendo minibreaks durante el día.
Estos autores, igual que otros muchos expertos, recomiendan hacer pausas cada 90-120 minutos.
Parece contradictorio que estando hasta arriba de trabajo, encima tengas que parar y «perder tiempo», pero pruébalo y compruébalo por ti mism@. La calidad de nuestro trabajo está muy condicionada por nuestro estado mental. Si estamos cansad@s, de mal humor, dispersos, tardamos mucho más en hacer cualquier tarea y la hacemos mucho peor.
Las pausas no tienen que ser largas, con 5-10 minutos es suficiente. Lo importante es que «desconectes», o sea, que dejes a tu mente irse a otros lugares que la tarea en la que estabas ocupada.
¿Qué puedes hacer durante estas pausas?
– Beber agua y/o tomar una fruta.
– Realizar respiraciones/meditar.
– Ir a caminar.
– Salir a que te toque el aire/sol y respirar.
– Visualizaciones positivas.
– Hacer algunos ejercicios de estiramientos.
– Cantar. 🙂 (vigilando dónde lo haces, no se piensen que te has vuelto loc@).
Prueba a hacer estos descansos durante el día y verás cómo disminuye tu stress, mejora tu humor y eres más productiva y también creativa.
Otro buen consejo: evita el «multitasking«, o sea, el hacer varias tareas distintas a la vez. Mirar los e-mails cuando estás redactando un informe, llamar por teléfono mientras haces una presentación… Todos sabemos que las mujeres somos muy capaces y buenas en esto, pero que lo podamos hacer no significa que debamos hacerlo todo el rato. Acostúmbrate a centrarte en la tarea que tienes entre manos, dedicándole tu plena atención (desconecta los avisos de e-mails entrantes, whatsapp…). La harás más rápido y mejor.
Y tú, ¿desconectas para ser más eficiente? ¿Qué haces durante estos minibreaks? ¿Cómo te sientan?
Si quieres más consejos sobre el día a día en el trabajo, te invito a leer mi artículo «Hábitos saludables en la oficina».
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